La transformación de Europa hacia las energías renovables es una de las metas hacia las que España está dando grandes pasos en los últimos años. Cada vez más expertos consideran que el crecimiento verde es una buena oportunidad económica para Europa, ya que además de aportar buena parte del PIB de los países, es una forma de luchar contra el calentamiento global y mejorar la calidad de vida de las personas.
Situación actual de las energías renovables en España
Según el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio de España, las energías renovables que más contribuyen actualmente a la producción energética en España son: la energía eólica (51%), la energía hidráulica (36%) y la energía solar (8%).
Esto es debido principalmente a un crecimiento en inversión tecnológica para la obtención de la energía eólica y solar, así como por el aumento de la producción de energía hidráulica, la cual tuvo un peso importante en 2020. Este gran impulso de los dos últimos años ha colocado a España en la actualidad en las primeras posiciones respecto al resto de países europeos en la en las energías renovables.
Estos avances indican la apuesta española por las energías renovables que siguieron creciendo en 2021, donde ya más de la mitad de toda la producción nacional de energía proviene de estas tecnologías.
Energía solar y eólica en España
Según la Unión Española Fotovoltaica (UNEF), España ocupó en 2019 la primera posición en Europa en instalación de potencia solar fotovoltaica, generando empleo y mejorando la competitividad del sector.
UNEF postula al sector como palanca para la recuperación económica del país, y según su postura esta reactivación debe inscribirse en un “proceso de transición ecológica”. Además, España fue en 2019 el mercado líder en el sector fotovoltaico a nivel europeo y el sexto a nivel mundial.
Por su parte, la energía eólica ha sido la segunda fuente de generación eléctrica peninsular en España en 2019, aportando el 20,8% de la energía total consumida. España fue en dicho año el quinto país del mundo por potencia eólica instalada. Asimismo, el sector eólico en España generó trabajo a unas 24.000 personas. Según el seguimiento de estos datos el sector de las energías renovables en España puede ser clave en nuestra economía.
Economistas de la Universidad de Oxford, han realizado una clasificación de la capacidad de producción ecológica de cada país. De esta clasificación, España sería uno de los países con mayor potencial para beneficiarse de una economía verde. Esto es debido a la capacidad para producir y mejorar en el desarrollo de productos ligados a las energías renovables o a las tecnologías de tratamiento y conservación del agua.
Normativa Europea respecto a las energías renovables
El 12 de diciembre de 2015 fue adoptado el Acuerdo de París por los países miembros de la UE, entrando en vigor el 4 de noviembre de 2016. Consistió en un tratado internacional sobre el cambio climático jurídicamente vinculante, en el que los países miembros acordaron reducir al máximo las emisiones de gases de efecto invernadero lo antes posible con el objetivo de reducir el calentamiento global.
Supuso un hito en el proceso multilateral del cambio climático ya que, por primera vez, un acuerdo vinculante hace que todos los países se unan en una causa común para emprender esfuerzos conscientes para combatir el cambio climático y adaptarse a sus efectos.
Su objetivo es limitar el calentamiento mundial a muy por debajo de 2, preferiblemente a 1,5 grados centígrados, en comparación con los niveles preindustriales.
Avanzando hasta el año 2018, se aprobó el acuerdo de la Unión Europea sobre la Directiva 2018/2001, relativa al fomento del uso de energía procedente de fuentes renovables. En ella se estableció que las pautas establecidas en dicho acuerdo deberían ser aplicadas por los estados miembros el pasado año. Esto supuso un gran avance en la conversión energética y una apuesta firme hacia las energías limpias en Europa y España.
España es un país que se ha caracterizado por tener una alta dependencia energética de los combustibles fósiles, alcanzando su máximo histórico en 2008, con un porcentaje del 81,3%. Esta cifra ha ido bajando durante los últimos años, pero la dependencia energética seguía siendo muy elevada en 2018, situándose en el 73,4%, lo que lo situaba casi veinte puntos por encima de la media europea.
Sin embargo, es en 2018 cuando en Europa se propulsan nuevas normativas al respecto y se produce el cambio positivo a favor de las energías renovables. Según detalló el Perfil Ambiental de España (PAE) realizado en 2018, se indicaba un aumento de la energía procedente de las fuentes renovables del 18,6% con respecto a 2017, (según datos de Red Eléctrica de España). Estos datos implican un aumento en la proporción de electricidad proveniente de fuentes renovables del 38,4%.
El PAE es un estudio que se realiza de forma anual. El objetivo es el de compartir la información ambiental, donde cada indicador se describe respecto al logro de los Objetivos del Desarrollo Sostenible establecidos en la Agenda 2030 de las Naciones Unidas.
Para favorecer que la producción de energía proveniente de fuentes renovables siga en aumento, y en base a alcanzar lo dispuesto en la directiva 2018/2001, el consejo de ministros, a propuesta del Ministerio para la Transición Ecológica, Este Real Decreto-Ley incluye medidas consideradas urgentes, las cuales favorecerán a una transición energética socialmente justa.
La mencionada normativa, establece medidas de aprovechamiento de los recursos. También actualiza la tasa de retribución financiera en la producción de energía eléctrica, reduciéndola a un 5,58% entre los años 2020 y 2025 (los últimos 5 años ha sido del 6,503%), traduciéndose esta media en un menor coste de la factura de la luz, tanto para los consumidores como para los Presupuestos Generales del Estado.
Objetivos sobre energías renovables en la UE
Según el acuerdo mencionado de la Unión Europea sobre la Directiva 2018/2001, con dicha normativa se persiguen unos objetivos clave a cumplir para el año 2030, los cuales son:
– Reducir en un 40% las emisiones de gases de efecto invernadero, estableciendo para ello una obligación de reducción de estas emisiones, equivalente a un 43% respecto al año 2005, a los sectores incluidos en el Régimen de Comercio de derechos de Emisión de la UE (RCDE), y un 30% para los sectores no incluidos en dicha categoría.
– Aumentar en un 32% la cuota de energías renovables, para lo cual, se ha establecido una cláusula en virtud de la cual, se realizará una revisión de la cuota para el año 2023.
– Aumentar en un 32,5% la mejora de la eficiencia energética, al igual que en el caso anterior, la directiva contempla una revisión para el año 2023.
Cabe destacar que, en 2021, las energías renovables han producido en España hasta el 46,6% de electricidad, mucho más que la energía nuclear y el gas natural juntos.
Para contribuir a alcanzar los objetivos establecidos en la mencionada directiva, cumpliendo los compromisos adoptados en el Acuerdo de París, la UE ha adoptado una serie de normas en cuanto a seguimiento y notificación entre los estados miembros, a fin de fomentar la transparencia de los gobiernos en cuanto a la aplicación de la directiva a través de la mejora de la legislación, incluyendo consultas a los ciudadanos.
Ante esta situación, ¿qué esperamos a partir del 2022?
Según estos objetivos se espera un fomento de las energías renovables para este año, estableciéndose un aumento del 43% para el 2022. Se espera que el consumo mundial de energía aumente un 2,2% en 2022 a medida que las economías vayan recuperándose de la pandemia.
Sin embargo, la vuelta a la normalidad energética en primavera de 2022 se aleja cada vez más. Según los datos de futuro del operador ibérico OMIP, se prevé que el 2022 sea el año con la luz más cara de la historia.
Teniendo en cuenta estas previsiones, el Gobierno está trabajando ya en una prórroga de las rebajas fiscales aprobadas en los últimos meses para aligerar la factura de todos los hogares.
En esta línea, las energías renovables adquirirán cada vez más protagonismo en la economía global. Las instalaciones solares fotovoltaicas (PV) a nivel mundial podrían experimentar un crecimiento de más del 20% en 2022.
Además, este hecho podría reforzarse gracias al IVA reducido para paneles solares propuesto por la Unión Europea con el objetivo de reducir la carga de impuestos sobre productos que ayuden a la transformación verde y digital en Europa.
Si España se decide por aplicar el IVA reducido en los paneles solares supondrá una medida más para potenciar el autoconsumo residencial, como lo son también las ayudas del gobierno para las instalaciones de placas y baterías y descuentos en el IBI.
Todas estas tendencias hacen prever que el mercado energético seguirá convulso durante el 2022, por lo que cada vez cobra más sentido la apuesta por la energía solar tanto a nivel residencial como industrial.
Las subastas seguirán siendo un mecanismo de adquisición indispensable para la energía solar a gran escala, con licitaciones periódicas en los principales mercados, como Alemania, Francia y España. Solo estos tres países están listos para asignar al menos 11 GW de nueva capacidad en subasta en 2022.
Paralelamente, la contribución de los proyectos sin subsidios seguirá aumentando, respaldada por la creciente demanda de proyectos corporativos.
Mientras tanto, la nueva legislación de la UE ha allanado el camino para tasas de IVA reducidas en paneles solares, que junto con las devoluciones de impuestos en varios estados miembros, mejorará los períodos de recuperación de las instalaciones residenciales en este año que acabamos de comenzar.
Dial: líder en energía fotovoltaica
DIAL SOLAR RENEWABLES con sede en A Coruña fue constituida fundamentalmente por un grupo joven de profesionales del sector de las energías renovables. Los valores de innovación, experiencia y su apuesta por el mercado internacional han hecho que en 10 años DIAL SOLAR se posicione como uno de los mejores Parnert para inversores de energía fotovoltaica.
Sus obras se encuentran tanto en el sector público como en el privado, en el territorio nacional, europeo y también con presencia en Emiratos Árabes Unidos.
La ejecución de sus construcciones y la excelencia en la calidad logran la satisfacción de los clientes, así como el respeto a la sostenibilidad y el medio ambiente acordes con las normativas europeas, lo que les sitúa en una empresa puntera del sector de las energías renovables que acompañan al crecimiento económico nacional a partir del uso de energías limpias y con responsabilidad corporativa. Síguenos en nuestro canal de Youtube.